Este jueves 29 de diciembre Pelé falleció a sus 82 años en el hospital Israelita Albert Einstein de San Pablo, luego de complicaciones en su lucha contra el cáncer de colon. De esta manera, dejó un enorme legado en el mundo de fútbol que llora la inmensa pérdida del astro brasileño.
Se convirtió primero en un ícono del fútbol en su amado Santos, club en el que se consagró campeón dos veces de la Copa Libertadores, en dos oportunidades de la Copa Intercontinental, en seis ocasiones del Brasileirão, del Torneo Río-São Paulo en cuatro oportunidades y diez veces del Campeonato Paulista.
Desde muy temprana edad fue considerado un prodigio del fútbol y tuvo su primer partido con Santos a los 15 años (pocas semanas antes de cumplir los 16) y fue una pieza clave en el Brasil que ganaría la Copa del Mundo por primera vez en Suecia con solo 17 años (marcó dos goles en la gran final ante el dueño de casa). Pelé, además consagró Campeón del Mundo con la selección brasileña en otras dos ocasiones, en el mundial de Chile 1962 y México 1970.
Su debut en la Selección de Brasil se dió con 16 años ante Argentina en el Maracaná, en el marco de la Copa Roca. Fue triunfo 2-1 de la selección argentina pero aún así logró marcar un gol. Fue el primero de 77 tantos con la casaca del Scratch, récord absoluto que se mantiene hasta el día de hoy.
Su única experiencia fuera de su país natal se dio en el ocaso de su carrera, al firmar con el New York Cosmos. Allí coincidió con otras grandes figuras de la época como Franz Beckenbauer antes de colgar los botines definitivamente en 1977. Al retirarse se desempeñó en otras areas como la actuación, el canto y la política, dónde fue destacado en varias oportunidades.
«O Rei» se retiró con la impresionante marca de 1301 goles, según la RSSSF, y 775 oficiales, actualmente la cuarta mayor cifra en la historia. Es también el máximo goleador en la historia de la Selección de Brasil y del Santos. Considerado toda una deidad para los amantes del deporte.