La vereda de Avenida del Libertador al 1700 está al borde del hundimiento y parece que a nadie le preocupa. O al menos no hasta que ocurra un accidente. Una casa deshabitada con serios problemas edilicios y su vereda rota es el problema que aqueja a los vecinos de la zona.
En la casa funcionaba anteriormente una guardería. Hoy allí no vive nadie pero está apuntalada con vigas en la parte del garage porque hay riesgo de que se desmorone, lo cual también es peligroso. Esto también provocó roturas en un local comercial colindante. Pero lo más preocupante es la vereda: se está hundiendo desde hace tiempo y las malezas no dejan de crecer.
Los vecinos realizaron distintas denuncias para lograr la intimación por parte del Municipio hacia el privado. Sin embargo, no hubo cambios por lo que decidieron tapar ellos mismos el pozo para evitar nuevos accidentes porque, según relatan, se habían golpeado varios vecinos.
Ahora bien, si el Municipio intima y el privado no acciona, ¿quién se hace cargo de la situación? ¿y si ocurre un accidente grave a quién se reclama? ¿así lograremos tener algún día una ciudad más accesible o al menos con veredas en buen estado?