El pasado viernes, el Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal (IMBIV), publicó una nota en la cual su equipo de investigadores expresan su rechazo a las obras de autovía de Paravachasca y Punilla, a la vez que acompaña a las comunidades afectadas que se manifiestan en contra del desarrollo de estos proyectos.
En la nota, indican que su oposición se debe «no sólo a las irregularidades y deficiencias existentes en las diferentes etapas de planificación, estudio de impacto ambiental y audiencia pública sino y, principalmente, porque atentan contra la conservación de los ecosistemas nativos de Córdoba y los bienes naturales que éstos proveen, sin que se propongan además, mecanismos de restauración y remediación adecuados para los ecosistemas involucrados en ambas propuestas«.
A su vez, añaden: «en el contexto global de crisis ambiental y climática resulta imprudente y desatinado continuar propiciando la devastación de los escasos ambientes nativos remanentes en la provincia, en especial de las áreas con máxima categoría de conservación según la Ley 9814 de Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos«.
Cabe destacar que como organismo científico, el IMBIV es dependiente de la Universidad Nacional de Córdoba y el Conicet.
Para cerrar la nota, desde el ente se pusieron a disposición de para encontrar la forma de reducir al mínimo y remediar los efectos negativos que traerán las obras y otras vías de comunicación que atraviesan áreas de bosque nativo.